Eduardo Sandoval: Bonito todo, no pasa nada

Cuando Eduardo Sandoval tocó por primera vez un trombón supo que tenía delante el instrumento con el que podía expresar todas sus inquietudes musicales. Desde ese momento construyó una carrera apegada al jazz y al latin jazz, pero sin desligarse de la música popular bailable o de las sonoridades más contemporáneas.

Recientemente, salió de su zona de confort y por primera vez se lanzó a cantar en uno de sus temas. De ese proceso creativo nació el videoclip “Bonito todo” premio en la pasada edición de los Premios Lucas en el apartado de Mejor Video de Estudio.

Desde el lanzamiento, su primer sencillo como interprete se coló en las listas de éxito de Pista Cubana y superó las siete mil visualizaciones en Youtube en pocas semanas. Aunque el clip es de bajo presupuesto, el director, Eduardo Aguilera, se las ingenió para lograr eso que plantea el minimalismo y contar más con menos.

En alrededor de tres minutos y medio, el clip narra todo lo que pasó en el estudio durante el proceso de grabación, y lo más importante, se le puso rostro a la música, a la voz de Eduardo y a los instrumentistas que lo acompañaron en ese viaje musical. El ambiente jovial le da un plus a este clip más allá de la música. Lo mismo sucede con las imágenes intercaladas entre blanco y negro y en colores. Cada elemento es parte imprescindible de la narrativa y los instrumentos que participan, los protagonistas.

“Bonito todo” es un tema salsero, con una cadencia distinta gracias a la magia de la ejecución del trombón de Sandoval. Cada uno de sus temas tiene intrínseco la cubanía y la música popular bailable. Con su instrumento imita la voz y en todo momento busca tocarlo sin que suene grotesco. Precisamente, gracias a ese cuidado del detalle y a la maestría a la hora de tocar lo han apodado como “el trombón de Cuba” y el clip no es la excepción. No se puede ir a bailar a la casa del trompo.

En la cuarentena a causa de la covid-19 muchos fueron los músicos que optaron por los videos en estudio para mostrarse al público, porque no siempre se contaba con los montos necesarios para realizar clips de mayor envergadura. No obstante, un montaje simple y una narrativa lineal también puede considerarse como un video digno de una nominación o un premio, y, por esos motivos, se incluyó en los apartados de Lucas esta categoría. Aplausos para los Eduardo, Aguilera y Sandoval

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