A decir de Teresa Yanet la música llegó a ella para quedarse desde pequeña, cuando su abuela escuchaba en la radio aquellos boleros, la música de María Teresa Vera, César Portillo de la Luz, la música cubana en general.
“(…) cogía un pomito de desodorante y me ponía delante del espejo a cantar. Tenía un vecino que me preguntaba que qué quería ser yo cuando fuera grande, y siempre le decía que cantante de cabaret. Creo que de alguna manera siempre tuve claro que quería ser cantante”, así recuerda Teresa Yanet los primeros momentos en los que se adentró sin saber en el arte.
Con 14 años, Teresa cursaba la secundaria básica y todavía su madre no la había visto cantar, pues ella tenía miedo escénico, no obstante, se presentó a las primeras audiciones para abrir el Palacio del Teatro Lírico Nacional en La Habana. Se preparó durante dos semanas y logró el escalafón número cinco entre los que fueron aceptados.
Puede que usted la recuerde como concursante y finalista de Sonando en Cuba 2017, pero si siguió de cerca la telenovela de Felo Ruiz “Asuntos Pendientes”, la voz de Teresa Yanet recorrió su hogar cuando el tema de presentación y la banda sonora se escuchaban.
Sobre la experiencia la artista expresó: “Uno de los retos más complejos que yo he tenido fue justamente componer toda una banda sonora para una telenovela”.
¿Cómo vivió Teresa Yanet el proceso de creación musical de “Asuntos Pendientes”?
“Hacer la música de la telenovela fue más que un reto para mí, porque era la primera vez que hacía, por llamarlo de alguna manera, una música por encargo. El reto justamente estuvo en que como compositora tenía que despojarme de mi ego, de lo que sentía, para ponerme en la piel de personajes, con otros conflictos, con otras vivencias; y a partir de ahí empezar a poner notas, palabras, y por supuesto, una vez que me leí el guion, empezaron a nacer muchas ideas”.
Teresa explica que el trabajo sonoro de la telenovela resultó intenso, difícil y extremadamente sacrificado, pero que se compensó con la satisfacción que experimentaron, ella y el equipo de músicos con los cuales contó. Como dato curioso dejó escapar que la canción que da inicio a cada capítulo de “Asuntos Pendientes”, cuyo nombre coincide con la producción, constituyó la última en componerse.
“(…) después que ya me leí todo el guion de la telenovela, quería que tuviese ese impacto de la típica canción de telenovela que tiene esa fuerza, potencia, me lo propuse. Me costó, pero, no hablando desde mí, sino desde toda la gente que me ha escrito y me ha hecho llegar sus hermosos mensajes, a través de todas mis redes sociales, siento que llegó -tanto la telenovela como la música- y esa es mi mayor felicidad de que, después que pasen los meses, que ya la novela ni siquiera esté en el aire, me sigan llegando los videos de la gente cantando y danzando las canciones. No existe nada como el cariño del público”.
Desde la distancia que separa a Cuba de España, país donde se encuentra Teresa Yanet en la actualidad, la artista recibe la acogida que los cubanos le han dado a la canción, así como los comentarios en las redes sociales que elogian el trabajo musical. Pero ¿qué valor puede ofrecerle un clip a una canción?
“Pienso que todo está en dependencia de lo que quieras lograr con la música que haces, de hacia dónde, hacia qué público quieres dirigirte, a quién quieres que llegue la letra de tus canciones, la melodía, el estilo, el flow de cada canción. A partir de ahí, veo el videoclip como un complemento para reactivar todo lo que has querido decir, visualizarlo, mostrarlo. Ahora vivimos en un tiempo en el que la gente necesita y quiere ver y saber. Lo de comercial depende del tipo de música que hagas, los géneros y estilos que abarques”.
“Vivo las canciones intensamente, lo que me hace interpretarlas y vivirlas como si fuese el único momento que existiera. Los videoclips me encantan, aunque solo tengo uno, ojalá que vengan muchos más que espero que sí. Para mí todos son grandes retos que uno tiene que afrontar porque de todo esto se aprende muchísimo. Muchas veces no me pongo límites, sobre todo porque quiero aprender, intento aprender cada día de mi vida”.
El video al que hace referencia Teresa lleva por título “Vengo con mi rumba”, el cual se filmó en plano secuencial y representa más que un clip para ella porque refleja lo que es como persona, la realidad suya y la de muchos cubanos. Aunque confiesa no lo ve en varias ocasiones, cuando lo hace lo vive como si se encontrara en el set de filmación.
“(…) es mi raíz, mi religión, mi idiosincrasia, es Cuba, y, sobre todo, tiene la fuerza, el ímpetu, el deseo que soy yo, que es Teresa. Osmanize, a quien agradezco siempre, encontró la esencia de lo que encierro desde el primer momento que me vio y a veces pienso que, desde el punto de vista de los realizadores, ahí es donde tienen su mayor reto, encontrar el sello que identifica a cada artista, y con él fue como amor a primera vista, entendió todo y apenas nos conocíamos. (…) Es la descripción gráfica de Teresa Yanet”.
Entre los proyectos más cercanos de la artista cubana se encuentran conciertos en España donde exalta la música de Cuba con temas como “Drume negrita” y “Chivo que rompe tambó”, ambas piezas de Bola de Nieve.
Al respecto dijo: “Es también un concierto con cierta actuación porque es muy dramatizado. Este tipo de música no la puedes hacer si no la vives e interpretas, es la única manera de que le llegue a la gente”.
“Para el 2024 arranco enero hasta septiembre con una gira por España y Alemania dentro del programa Mar de Músicas. Han contado con 14 participantes de diversos países y hemos quedado dentro de esta gira. Llevar la música de Cuba al mundo entero me place muchísimo y me hace muy feliz”, comentó.
Cuando se le pregunta a Teresa Yanet qué elementos no pueden dejar de estar presentes en su música, una respuesta certera la trae de regreso a esta Isla: “Siempre intento que mi música tenga sabor a Cuba y que tenga, por muy lejos que me quiera ir, digamos en cuanto a género o estilo musical, elementos de la música cubana, de mi raíz”.
